El contouring es un buen aliado para aportar luz, potenciar los puntos fuertes del rostro, y corregir las imperfecciones. Ésta técnica viene pisando fuerte ya que nos permite afinar, ensanchar, dar luz y quitar volúmenes donde nos interesa. Aquí una pequeños tips para que hacer contouring sin morir en el intento.

Cuadrado: Claros en el centro de la frente y la barbilla. Oscuros en el lateral de la frente y la parte angular del mentón. Colorete en el punto bajo de la mejilla. Redondo: Claros en la parte central de la frente y la barbilla. Aplicar colorete de manera alargada y vertical, llegando hasta la sien. Pera: Oscuros en la parte baja de la mandíbula y hacia los laterales. Luz en los laterales de la frente. Colorete descendente.

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